Interés perverso e inconfesable es su posición, la ley de dios no amenaza ni castiga, advierte, pero la del hombre si sanciona, y aunque muchos de los clericós católicos han olvidado su misión para vivir de acuerdo a sus intereses violentando ellos mismos sus creencias ahora pretenden boicotear el Censo Nacional de Población 2010.
La razón que esgrimen es que no es claro para las gentes las opciones para definir sus preferencias a la iglesia católica en México y acusan de manipulación y debilitamiento estadístico en contra de esta creencia calificando de censo tramposo la actividad que desarrolla el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
Por no responder a los intereses de la jerarquía católica en México que demandan en dicho censo se establezca el número de fieles de esta creencia argumentan que menos se podría conocer las condiciones de empleo, educación y pobreza en el país, en este censo que se desarrollara del 31 de mayo al 25 de junio del 2010.
Luego culpan a la realización de este censo en las condiciones actuales de que solo arrojara como resultado el debilitamiento estadístico de la iglesia católica lo que permitirá a los acérrimos enemigos las herramientas para restar fuerza a esta institución que pese a todo sigue manteniéndose como una de las mas respetables y con el mayor número de fieles en el país.
Pero la pregunta seria que sabe el clero católico de empleo, educación y pobreza, si en el primer punto no encontramos curas desempleados o iglesia cerradas, si en la educación que imparten en sus colegios por onerosa es elitista y en cuanto a pobreza viven en la opulencia o es que acaso ignora que el Vaticano es uno de los estados mas ricos, económicamente, del orbe.
Pederastia, homosexualidad y una vida de lujo es lo que rodea a la iglesia católica, por ello, cada día es mayor el número de fieles que abandonan la creencia y no el diseño de un cuestionario como el que llevara a la practica el INEGI en el censo que esta por iniciar.
Mentir es pecado en el catolicismo y son pecadores por que están mintiendo. Arrepiéntanse que están a tiempo y dejen al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.
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